Muy cerca de nuestra casa hay un parque público muy lindo al que nos gusta ir a caminar, jugar y hacer pic-nic.
El viernes pasado, decidí llevarme la cámara para tomarle algunas fotos a los enanos mientras pasábamos una rica tarde juntos...
El parquesito como lo hemos nombrado de "cariño", tiene un camino de aproximadamente 800 metros de algo así como esto:
A José Adrián le gustó mucho jugar con los troncos... creo que la textura le llamó mucho la atención... era algo nuevo.
Juan Diego empezó "explorando" con un juguete de los de MacDonald´s que era algo como una lupa o vinoculares... quería ver todas las hojas a través de su "lente"...
Claro que tuvimos paradas técnicas...
Hicimos picnic...
Habiendo llenado la pancita... empezamos nuestra tradicional vuelta al parque... usualmente Juan Diego va en su triciclo y José Adrián en su carruaje y damos 3 ó 4 vueltas, pero ahora decidieron caminar, así es que solo dimos una.
E hicimos la respectiva parada en los columpios. No cabe duda que los niños tienen la capacidad de ver lo mejor de todas las cosas. Debo confesar que yo veo unos columpios despintados y viejos... ellos... ven nada más que oportunidad de divertirse...
Y sí que lo hicieron!
Aquí unas fotos tomadas con mi iPhone, no me atreví a tomarlas con mi cámara por aquello de los accidentes, especialmente porque terminé extremadamente mareada después de subirme con ellos a esa cosa que daba vueltas que ni se cómo se llama...
Adrián jugó solo en el sube-baja, pues en el asiento del otro lado, no hay como agarrarse jajajaja
¡Qué alegre la pasamos!
Feliz martes
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