Cuando se vive con cuatro hombres, puedes decir que tu vida tiene un "color azul"... Te rodean súper héroes, bicicletas, carros, pelotas, deportes y visitas a la emergencia; también estás constantemente rodeada de palabras que se refieren a cosas sucias, pero que para tus compañeros de vivienda parecen ser lo más gracioso que han oído en su vida. Pueden pasar riendo unos buenos 10 minutos repitiendo la palabra "moco".
Pero si hay algo que definitivamente te rodea cuando vives con cuatro hombres son las peleas... Es algo que traen grabado en su sistema. Sus juegos, sin importar como empiecen, resultan en algún momento en peleas.
Con peleas no me refiero a disputas y pleitos de que fulanito no me deja jugar con sus legos, o sutanito está haciendo trampa en el juego, o menganito me botó jugo en la tarea -pues claro que tenemos nuestra buena dosis de esas- pero con peleas me refiero a ese juego que únicamente ellos entienden en donde se "pegan", "patean", "aruñan", "tacklean" y todo aquello digno de un combate de video juegos... Esas peleas en que todos empiezan riendo y más de alguno siempre termina llorando... es a ESAS peleas a las que me refiero...
Creo que mis hijos llegarán a ser adultos y yo habré pasado todos estos años sin entender qué es exactamente lo que hace que ESAS peleas sean tan divertidas y necesarias. Javier constantemente me está diciendo que así juegan los hombres y que es necesario para su desarrollo. Yo honestamente... me declaro ignorante en el tema.
Sin embargo, dado que es y será siempre una constante en mi vida... he aprendido a vivir con ellas y he tenido que aprender a aguantar el juego para poder ser parte de su mundo.
Hace poco, mi suegro les regaló una cama elástica a los niños (¡Gracias Quique por cierto!). No hay día y hora en que no estén allí metidos... ¡es el lugar perfecto para LAS PELEAS! Ayer decidí tomarles algunas fotos en medio del caos... Dentro de ese caos usualmente es bastante difícil para mi sacar un pedazo bueno... siempre hay alguien a quien consolar o a quien regañar, solo para que dos minutos después, estén de nuevo en las mismas. ¡Vaya sorpresa que me llevé cuando vi las fotos en la computadora!
¿Será que me animo piensa JN?
Me ve como pidiendo mi aprobación...
Y claro que el también se mete con tan solo un año y dos meses... ¿Pueden ver todo lo que está pasando en esta foto? Hay patadas, manadas, apachones, aruñones... ¡¡un poco de todo!!!
Ohh si que la gozan...
Al ver las fotos me di cuenta de algo que cambió muchísimo mi perspectiva con respecto a las famosas peleas... pude ver como se integran y como se conectan a través de ese juego. Como dentro de todo son felices y están fortaleciendo su vínculo como hermanos.
No puedo decir que particularmente disfrutaré las peleas de ahora en adelante... especialmente cuando se me tiran tres niños encima... :P Pero si puedo decir que les he tomado algo de cariño...jajaja
La verdad es que es muy alegre la vida en color azul... con sus toques de color morado ¡¡claro!! (el rosado no es muy mi color... jajaja)
¡Feliz jueves!
